La apnea del sueño consiste en episodios de obstrucción de la vía aérea durante el sueño. Se considera que el ronquido es una de sus primeras manifestaciones y por tanto los pacientes roncadores pueden evolucionar hacia la apnea del sueño en el futuro.

Cuando se obstruye la vía aérea durante el sueño, el paciente deja de recibir oxigeno, de modo que cuando el nivel de este es muy bajo el paciente se despierta por esa falta de aire, a veces silenciosamente pero otras veces  con un estridor importante, estos episodios se repiten a lo largo de la noche. Aunque el paciente no es consciente de estos microdespertares, el sueño se desestructura y el paciente no descansa lo que le lleva a una situación de cansancio y tendencia al sueño inusual.

Todo este proceso de falta de descanso producirá múltiples trastornos en el organismo de graves consecuencias generales como son la aparición de diabetes, hipertensión con todas sus consecuencias, infartos cerebrales y de miocardio, impotencia sexual, incluso se ha visto que favorece el desarrollo de tumores malignos y un largo etc..

El diagnóstico se puede realizar con un registro del sueño en el propio domicilio del paciente, lo que es cómodo y fácil de realizar, pero para un diagnóstico mas preciso se necesita llevar a cabo una polisognografia realizada en una unidad de estudio del sueño.

Según el numero de episodios de apnea tendremos diferentes grados de afectación, leve, moderada y severa. Estos pueden seer tratados de modos diferentes

El tratamiento ira encaminado en la primera fase a medidas higiénico dietéticas, como pérdida de peso y eliminar la ingesta de alcohol antes de dormir.

Cualquier grado leve puede ser tratado con ferulas de avance. En nuestra clinica se realiza una  toma de impresiones de la boca del paciente para confeccionar una férula que se pondrá al ir a dormir y que le produce al paciente un avance de la mandíbula,  con ello se aumenta la via aérea y se eliminan las apneas nocturnas.

Casos mas severos precisarán el empleo de una maquina llamada CEPAP, con la que el paciente tiene que dormir, a través de una mascarilla nasal se transmite una presión positiva a la via aérea por lo que impide que esta se cierre durante el sueño y así no se producen las apneas.

Por último podemos realizar un avance maxilo-mandibular con cirugía, lo que produce un resultado permanente  aumentando la via aérea y así desapareciendo las apneas en casi el 100% de los casos

Como en definitiva es un problema obstructivo al aumentar el espacio de la vía aérea se puede resolver el problema, y eso lo conseguimos con cirugía a través del avance maxilo-mandibular, con una tasa de éxito superior al 90%, lo que supone que el paciente tiene una tasa de apneas inferior al 10% y puede dormir sin el CEPAP. Ver video explicativo